martes, 24 de marzo de 2009

AUTOEMPLEANA.

Nuestra compañera jardinera, Ana Espinosa del T.E. Norte, tambien conocida por "La Muita", me manda esta publicidad para colocarla en el blog.
Esta empezando a darse a conocer y hacer algun que otro trabajo.
Animo y mucha suerte. Un abrazo. Eugenio.




domingo, 22 de marzo de 2009

La importancia de los valores.

La educación en el proceso de integración es continua desde la etapa inicial del niño y su función es formarlo con una conducta basada en valores como lo son el respeto, la honestidad, responsabilidad, cooperación, solidaridad entre otros, para así estén preparado para la participación e incorporación a la sociedad.
Nosotros los docentes y la comunidad somos las piezas claves para alcanzar dichas metas ya que cumplimos con el deber de organizar, evaluar y sobre toda las cosas colaborar con la educación de nuestros alumn@s.
También nosotros los docentes ejecutamos papeles muy importantes como lo son ser facilitador, orientador, experto, modelo, asesor, innovador y pensador, promotor social basándose en la inquietudes del alumn@ y la entrega de las herramientas para la vida que van a ser utilizadas por ellos para integrarse en la vida social de una manera acorde.
La educación en valores dentro del ámbito educativo es un tareas bastante complejas que implica buscar las vías.
Es por ello que la educación debe estar basada en valores morales que suponen la comprensión y adquisición de conceptos y formas de actuar de acuerdo con valores sociales de responsabilidad, solidaridad, participación, respeto, justicia, deben conducir a un desarrollo de una moral autónoma, que conlleve una verdadera actitud democrática. Este es el objeto que se persigue al incluir el eje de valores en el currículo de la escuela básica, a fin de fomentar la reflexión permanente sobre situaciones que contribuyan a crear actitudes criticas frente a nuestra sociedad.
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viernes, 6 de marzo de 2009

Una nueva amenaza para nuestras palmeras.



Un escarabajo originario del Asia tropical, el picudo rojo o Rhynchophorus ferrugineus (Olivier, 1790), que se ha extendido a numerosos países ajenos a su área de distribución natural debido al transporte, es la enésima muestra de los graves peligros que aúnan el descontrol comercial que existe entre los distintos países, las grandes compañías y las multinacionales, con las modernas posibilidades del transporte de mercancías en cuanto a volumen y rapidez de trasiego se refiere.

La nueva plaga está causando graves problemas fitosanitarios en todas las partes en donde se ha introducido. En nuestro país ha disparado ya todas las alarmas de los organismos encargados de la vigilancia de fronteras y la protección agronómica, tanto a nivel estatal como autonómico. Aparece reiteradamente en prensa y está empezando a crear alarma social entre los cultivadores de Canarias, Comunidad Valenciana y Murcia.
Por una falta de previsión, han fallado las medidas preventivas y parece haberse aclimatado en el sureste de la Península y en las islas Canarias y ahora va a ser muy difícil erradicarla. Como suele suceder en estos casos, la nueva especie se ve beneficiada porque carece en las regiones mediterránea de enemigos naturales que limiten su propagación.


El insecto pertenece al orden de los coleópteros (escarabajos) y a la familia de los curculiónidos (gorgojos). Su gran tamaño, entre dos y cinco centímetros, y color rojizo ferruginoso lo hacen inconfundible. La larva perfora galerías de más de un metro de longitud en los troncos.
Sus plantas hospedantes son el cocotero (Cocos nucifera) y otras palmeras, en especial las del género Phoenix y la palmera de Guinea (Elaeis guineensis).
Cuando se ven afectadas por la plaga, sufren amarilleamiento y marchitamiento, pudiendo llegar a producirse la muerte del pie afectado. El control de esta plaga es complicado y por el momento, a falta de método seguro, acaba con la eliminación de los pies afectados y los que se sospecha pudieran estarlo.


La invasión de la Península
La plaga apareció por vez primera en España en 1994 , en el litoral granadino, en Almuñécar. Tanto aquella vez como las posteriores introducciones en diversos puntos de Andalucía oriental, Murcia y Levante, ha llegado a través de palmeras infectadas procedentes de Egipto u otros países del norte de África.
A principios de 2004 saltaron las alarmas en la Comunidad Valenciana al detectarse los primeros daños serios producidos por el picudo rojo. La Generalitat publicó inmediatamente una orden de declaración oficial de la plaga, y la Consellería de Agricultura, Pesca y Alimentación tomó medidas inmediatas. Se trató de controlar y erradicar la plaga, se ordenaron inspecciones y cuarentenas, se destruyeron palmeras afectadas y se impusieron restricciones al comercio de plantas, intentando impedir la entrada de todo ejemplar de palmera que no hubiese sido inspeccionado. En el levante español ataca tanto a las palmeras datileras (Phoenix dactylifera) como a las ornamentales.


El palmeral de Elche, declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO, constituido por un conjunto de huertas de palmeras datileras distribuidas por el casco histórico de la ciudad, que suma un total de cuatro millones de metros cuadrados de superficie y cuenta con casi medio millón de unidades, es el más afectado por el picudo rojo. Los expertos están comprobando, a medida que avanzan las investigaciones sobre el particular, que la plaga está mucho más extendida y es mucho más grave de lo que se creía.


El Picudo rojo en Sevilla

Lo más problemático es que ya está entrando en puntos del interior, pues algunos municipios de Sevilla ya están viéndose afectados por el picudo, sobre todo en la zona del Aljarafe.
Pueblos como Benacazón, Bollullos de la Mitación, Bormujos, Espartinas y Valencina de la Concepción.